sábado, 12 de mayo de 2012

ella

Se descubre de nuevo, sola camina, frente al espejo se peina, tarareando las notas que pretende alcanzar
Nadie le dijo que la soledad tenía un sabor tan dulce
No le habían enseñado a hacer lo que quisiera
Siempre pensó que responder al deseo de otro era ser mejor, ser mujer
Hoy se hunde en los vestigios del futuro que un día le dijeron debía tener
Y el mañana es una ilusión sin sentencias, un mar abierto, un jardín por plantar
Los acuarios se multiplican, las arrugas alrededor de los ojos también
Miras peces, miras ojos, miras y miras y de nuevo descubres tu rostro
Y amas, amas lo que quieres amar, a quien se deja amar por tu deseo tan incierto, tu incapacidad de tatuarte nombres
Pensabas que podías ser para siempre, pero sólo estás en el silencio entre una nota y otra, mientras muere la noche, mientras nace el día, en un tibio azul que hoy cobija todo, hasta la infancia.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La imagen de un ángel peinándose frente al espejo es un hermoso vestigio que recuerda el futuro: cosas que aún no han sucedido. El vivir cada día con amor, es más bello que creer que se ama el infinito.

Antonieta dijo...

sí, es más bello, resultó ser mucho más bello.